- ¿Des de cuándo estáis con el proyecto? Qué necesidad detectasteis?

 - El proyecto está a punto de hacer 2 años esta primavera. La idea parte de la voluntad de hacer reflexionar a la gente de nuestro entorno poco concienciada con estos temas, de una manera amable y didáctica, sobre situaciones de opresión a las que nos teníamos que enfrentar en nuestro día a día para ayudar a una toma de conciencia. Fue así como decidimos aprovechar el interés de Emilio por el dibujo y todo lo relacionado con lo social con la curiosidad y sentido de la justicia de Raúl. La apertura de la cuenta fue propiciada también por nuestra reflexión sobre el hecho de que cuando la gente no entiende algo tiende a rechazarlo en lugar de cuestionarlo o respetarlo (de ahí el hashtag con el que empezamos #JustRespect).

​

 - A parte de defender y luchar por los derechos del colectivo LGTBIQ+, creéis que es compatible con el movimiento feminista? 

 - Por supuesto. Creemos que ambos movimientos se ven afectados por el mismo opresor, el cis-heteropatriarcado, y ambos buscan la liberación por encima de la asimilación. Las luchas son diferentes, pero pueden y deben darse la mano. 

​

  - ¿Qué creéis que puede aportar la lucha del colectivo LGTBIQ+ al movimiento feminista? 

 - Una mayor amplitud y conciencia sobre lo que es el género. El feminismo a veces tiende a reducir el género en términos binarios (hombre/mujer), cuando en realidad existen más de dos identidades de género. Además, también puede contribuir a una visión interseccional del feminismo, que no tenga solo en cuenta a las mujeres blancas heterosexuales y de clase media, sino que éste esté protagonizado por todo tipo de mujeres (lesbianas, trans, intersexuales, asexuales, bisexuales, racializadas, discapacitadas, etc.). 

​

 - Consideráis que dar voz y visibilidad al colectivo en redes, puede ayudar a todes aquellas personas que se sientan perdidas o se cuestionen su orientación sexual o identidad sexual o de género? 

 - Sí. Muchas personas LGTBIAQ+ denunciamos haber crecido sin referentes. Hoy en día, en la era de la información, gracias a las redes sociales es mucho más fácil que, si estás siendo rechazade en tu entorno familiar, escolar, etc., puedas encontrar redes de apoyo en Internet. O que si estás dudando sobre tu orientación o identidad, lo cual es completamente normal, puedas, a tu ritmo, ir observando qué hay ahí fuera y ver que existen lugares seguros donde poder dudar de ti misme y consultar tus dudas. 

​

 - ¿Cómo consideráis el juego que tiene actualmente el lenguaje inclusivo? En el ámbito educativo, ¿Creéis que por parte del equipo docente, la primera clase de presentación seria necesario preguntar a les alumnes con que pronombre se identifican? 

 - El lenguaje construye la realidad. Eso es un hecho. Pero además, es un arma potente para el activismo. En el momento en el que yo digo “hola, chiques”, estoy provocando una reacción en les receptores del mensaje, que, aunque puede que muestren rechazo de primeras, al menos se plantearán por qué he dicho una “-e” y no una “-o” y esto les haga querer indagar. Además, estaré haciendo que todo el mundo se sienta incluido.

Deberíamos normalizar el preguntar por los pronombres y sí, sería maravilloso que les docentes predicasen con el ejemplo. Pero no es fácil. Hacerlo te expone a entrar en conflicto y no siempre se está preparade ni se tiene la energía para la confrontación. No obstante, creemos que debería ser el camino a seguir. 

​

 - ¿Cuál ha sido el aprendizaje más constructivo y importante que habéis tenido hasta dia de hoy con el proyecto Emirau? 

Pregunta difícil. Quizás, que al final del día, una vez nos quitamos todas nuestras capas: identidad de género, orientación, etnia, etc., todas las personas pisamos el mismo suelo y que donde hay odio, hay herida sin curar y que no se puede ayudar a quien no quiere ser ayudade. 

También haber descubierto la “interseccionalidad”, el comprender que todas las personas podemos ser discriminades, por lo que tenemos que ser muy conscientes de nuestros privilegios para entender siempre todas las posiciones. 

Por último, siempre agradecemos mucho el gran tejido social que hemos construido desde las redes sociales, una comunidad de apoyo y resiliencia que facilita el aprendizaje. 

​

 - ¿Cuáles creéis que son los prejuicios que más se repiten hacia el movimiento feminista? Y hacia el colectivo? ¿Creéis que visibilizar y revindicar a los dos movimientos hacen que poco a poco se vayan introduciendo en las aulas educativas?

 - Hacia el feminista: que el feminismo va en contra de los hombres. Cuando esto no es así. El feminismo lucha contra un sistema, el cual, por cierto, también oprime a los hombres. Se necesita hablar más de la masculinidad tóxica. 

Hacia el colectivo: nos suelen asociar a la promiscuidad y perversión de la infancia. En general, se nos suele asociar y reducir al sexo: lesbianas (“uf, lesbianas, qué morbo”), bisexuales (“¿Bisexual? ¿Te molaría un trío?), gay (“son todos muy promiscuos”), trans (“qué morbo una mujer con pene”), etc. 

Sí, toda esta nueva oleada de información en las redes y el gran trabajo que están realizando muchas ONGs hace que cada vez estemos más presentes y de mejor forma en los medios y también en las aulas. 

​

 - En cuanto a toda la polémica que existe alrededor de las TERFS, he podido ver que Emirau defiende a todas y cada una de las siglas del colectivo. ¿Creéis que es necesario que las mujeres trans esten en la lucha feminista en la misma posición que las mujeres cis? ¿Por qué? 

Por supuesto. Es más, no creemos que tenga que haber posiciones dentro de un colectivo. Sería contradictorio desde una perspectiva interseccional. Las mujeres son mujeres, sin más etiquetas. Está bien distinguir entre “trans” y “cis”, cuando se quiere reivindicar la lucha y las opresiones de las mujeres trans, pero nada más. Si se quiere normalizar a las mujeres trans, empecemos a hablar de ellas como mujeres, punto, sin más etiquetas. A no ser que ellas digan lo contrario. 

​

 - Estáis de acuerdo con la siguiente frase: Quien no entiende que el sexo no entiende de sexos, es que no entiende el sexo. Puede ser un poco redundante todo, en resumen que el sexo no entiende de sexos. 

 - Eso cantan en una canción el grupo Arnau Griso, el cual nos gusta mucho. Estamos 100% de acuerdo. La atracción es hacia el género, no hacia el sexo. Este es un tema delicado, ya que para entenderlo tienes que haber pasado por un proceso importante de deconstrucción

y haberte planteado muchas cosas. Cuando aprendes a mirar a la persona que tienes delante por lo que es, una persona, te acabas olvidando de lo que tiene entre las piernas. El deseo, igual que otro muchos otros factores, es construido. 

​

 - ¿Creéis que gracias a redes tanto el colectivo LGTBIQ+, como el movimiento feminista se han podido reivindicar más y visibilizar? ¿Cuál creéis que seria "la pocima mágica" para conseguir una sociedad feminista i libre de LGTBfóbia? 

Sí, sin duda. Gracias a las redes, tanto el colectivo LGTBIAQ+ como el feminista, han podido tejer mayores redes de apoyo, ponerse en contacto con personas en diferentes puntos del país, incluso del planeta y unir fuerzas para reivindicar sus derechos y visibilizar sus realidades. Son una herramienta, que si se utiliza bien, puede tener un gran impacto en los cambios sociales que presenciaremos en los próximos años. 

No creemos en fórmulas mágicas. Lo que sí que creemos es que la información es poder. Cuanto más accesible hagamos la información, cuanto más respetemos los procesos de cada persona, cuanto menos juzguemos, cuanto más escuchemos y cuanto más acompañemos, más probable será que se produzca un cambio. Límites y amor, siempre. Ante una agresión: denuncia. Ante una pregunta: información y respeto de los procesos de esa persona. Eso sí, una vez te pones las Gafas Violetas y las Gafas Queer, ya no hay vuelta atrás.